SEMANA EMMA PEEL POR UN MUNDO MEJOR

Algo pensé en estos días sobre el modo en que me conduciría en lo que podríamos dar en llamar el affaire emma peel. Comparto con Uds. lo resultante de tales sesudas meditaciones.

MANIFIESTO FICCIONALISTA #1

Emma Peel no es emma peel. Como todo lo obvio no está mal ponerlo de manifiesto. Emma Peel es uno de los personajes más adorables –posiblemente el más adorable– de la historia de la televisión británica y de todo el orbe. Interpretado por Diana Rigg, estupenda y hermosa actriz inglesa, la compañera del Sr. Steed en Los vengadores es un ícono de la femineidad que conjuga en sí inteligencia, coraje, charm, destreza, sex appel y belleza. Todo aquello que despierta la pasión y admiración de ambos géneros. (De la Emma Peel en la piel de Uma Thurman para la remake cinematográfica, paso. Todos mis respetos hacia la musa del buen Quentin, pero no me voy a dedicar a comparaciones casi siempre odiosas.) Bien, decía: ella no es esta emma peel. Esta emma peel es una advenediza que se apodera de un nombre y lo usufructúa de una manera algo triste que nada tiene que ver con el espíritu de la Emma Peel catódica. Ni un mísero remedo. Basta recordar cualquier episodio de la serie que honraba con su carismática presencia para notar lo astronómicamente lejos que emma peel se encuentra de Emma Peel. Podría haberse puesto el nombre de alguna malvada de telenovela vernácula o de la que hacía Joan Collins en Dinastía pero no, todo mal, le pifió fulero. Digo, no es que quien esté haciendo uso del nick deba adoptar una actitud digna del mismo, pero bueno, a little respect ¿no?

ficcionalista! no es emma peel. Cuando se opta por sostener un blog (no) se elige el destinatario. Y que se me permita el juego porque la verdad es que no tengo la menor idea de cómo es. Agarro desde Mikhail Bajtin hasta Sergio Olguín pasando en la caída por Barthes y Borges y no termino de tenerlo claro. Pero bueno, lo cierto es que mi a) pésima; b) aceptable; c) excelente (tache lo que le parezca o agregue opciones pertinentes) prosa ficcionalista convoca a emma peel. Eso es innegable e inevitable. Sería interesante conocer cuál es la lectura que ilumina sus días la que sospecho exquisita. Más me deleitaría aun, poder leer la obra de su pluma. Digo, algo más que las pálidas diatribas en ataque a las personas y a lo editado en este sitio. A lo mejor está a la altura de sus lecturas. Sería fascinante que así fuese. Lamentablemente (para ella) esa posibilidad no produciría el (para ella) deseable objetivo de que yo me dedicase a otra cosa como, por ejemplo, a la porcelana fría. Lo cual tal vez sí sea una verdadera lástima.

Todos somos emma peel. Lo que parece evidente es que emma peel, el impropio avatar que eligió para manifestarse en esta página alguien que quizá no tiene nada mejor que hacer (lo que de algún extraño modo me honra), puede ser un buen símil del pequeño Darth Vader que todos llevamos dentro. Sí: todos somos Anakin. Un Hyde para cada Jeckyll. Un Hulk para cada Banner. emma peel (también) soy yo, si Uds. y el buen Gustave me permiten el uso. Y eso es parte importante de la densidad óntico-existencial que nos caracteriza. Celebremos entonces a la emma peel que todos llevamos dentro.

Por todo esto, en este pequeño pero no por eso menos emotivo homenaje declaro hoy, domingo 3 de octubre de 2004, inaugurada la Semana emma peel por un mundo mejor.

¡Descorchemos juntos el champagne que emma peel trajo a esta página!
¡todos somos emma peel!
¡Viva emma peel!
Eso.
Nada más.