mañana de domingo
Como casi todos los domingos, compre mis diarios y me fui a desayunar al bar de siempre. Se notaba un movimiento fuera de lo común. Los habitués no estaban en sus mesas de costumbre y se veían caras extrañas: personas que se habían acercado a compartir un café con familiares y parejas después de haber ido a votar temprano. En general, siempre hay mucho lector del gran diario argentino y algunos otros pocos de la tribuna de doctrina. Las charlas que acostumbro oír en ese contexto son las de repetidores de títulos de las corporaciones mediáticas; mucha señora mediopelo indignada con la Cristina y mucho viejo medio garca preocupado porque el barrio se le llena de extranjeros no precisamente franceses y canadienses.
Bueno, la cosa es que entre todos esos circunstanciales visitantes se escuchaban otras conversaciones. En una mesa, una pareja acompañada de quien bien podría ser una tía de él o de ella, se hablaba de cómo seguir la tendencia en Ramble Tamble y de ciertas desgracias por las que había pasado en la mañana el gobernador de Chaco. Mientras, en una mesa a mi lado, casi mi espalda, una elegante y muy casual chica bien de unos 42 nuevos y bien llevados (por lo que me pareció entender en una de sus innumerables llamadas a su celular, al parecer con motivo de su cumpleaños), conversaba con su padre, un señor muy bien trazado. En contradicción abierta con mi prejuicio, en un momento, se entregó a una encendida perorata de por qué, frente al avance no sólo nacional sino también internacional de la derecha, ella había votado, aun con las reservas del caso y con la esperanza de no sentirse decepcionada en el futuro, por defender la continuidad de éste proyecto y modelo.
Dos sorpresas en la mañana. Dos gratas.
Yo salgo en minutos a emitir sufragio. Salgo con la esperanza de que, tal vez, frente a tanta operación política de los grandes medios y tanta indignación del mediopelo, los números finales sean mucho más edificantes y esperanzadores que los que -desde pantallas, parlantes, papel prensa y monitores- estuvieron dibujando.
Bueno, la cosa es que entre todos esos circunstanciales visitantes se escuchaban otras conversaciones. En una mesa, una pareja acompañada de quien bien podría ser una tía de él o de ella, se hablaba de cómo seguir la tendencia en Ramble Tamble y de ciertas desgracias por las que había pasado en la mañana el gobernador de Chaco. Mientras, en una mesa a mi lado, casi mi espalda, una elegante y muy casual chica bien de unos 42 nuevos y bien llevados (por lo que me pareció entender en una de sus innumerables llamadas a su celular, al parecer con motivo de su cumpleaños), conversaba con su padre, un señor muy bien trazado. En contradicción abierta con mi prejuicio, en un momento, se entregó a una encendida perorata de por qué, frente al avance no sólo nacional sino también internacional de la derecha, ella había votado, aun con las reservas del caso y con la esperanza de no sentirse decepcionada en el futuro, por defender la continuidad de éste proyecto y modelo.
Dos sorpresas en la mañana. Dos gratas.
Yo salgo en minutos a emitir sufragio. Salgo con la esperanza de que, tal vez, frente a tanta operación política de los grandes medios y tanta indignación del mediopelo, los números finales sean mucho más edificantes y esperanzadores que los que -desde pantallas, parlantes, papel prensa y monitores- estuvieron dibujando.
12 comentario(s):
Los resultados finales permitirán medir la influencia de la web 2.0 en las operaciones mediáticas de los multimedios?
Para el hombre de a pie, la web 2.0 es una entelequia digna de la jactancia intelectual. La Nación agitará sin duda el fantasma del fraude.
(¡Mierda! Estos comentarios me hacen sentir el director de la Biblioteca Nacional...)
No querido, F. Ya no nombran tipos que escriben lindo en la Nacional (¿o me va a decir que le gusta la prosa de González?). Usted no corre riesgos.
Ahora que se termina la campaña, ¿los kirchneristas van a dejar de insultarme por no ser kirchnerista? Por dos años, dale, dale, porfi.
Abrazo!
Mi estimado Federico: acá, aunque su prosa tienda a asimilarse cada día más con la de Ingenieros, a HG lo queremos casi como a un tío que le da duro al tinto en los asados.
Que yo sepa usted no tiene amigos kirchneristas (por lo menos, los de mutuo conocimiento); tiene algunos amigos no-gorilas que se entretienen llevándole la contra a su tendencia al comentario ultrapiloso.
Si no fuera con eso ¿cómo nos entretendríamos?
Nuestros saludos a la tercera de la lista que justamente salió tercera (por lo menos con los datos que manejo a esta hora).
lamento informar que esta vez, los malditos medios tenian razon. Perdieron. Por algo debe ser. Por algo avanzo la "derecha", esa entidad metafisica dueña de medios y capital. (o sera que tal vez la gente, esa gente mediopelo, se cansa? nose, habria que pensarlo.)
Anónimo: firmá que acá somos gente civilizada, aunque no seamos de "derecha".
"Derecha" que no es una entidad metafísica en el sentido en que vos la entendés. "Metafísica" no significa "irreal", "intangible" o "ideal". la derecha, en todo caso, es una "entidad ideológica", real y efectiva. Y peligrosa para un importante sección de la población.
Y sí, el mediopelo se cansa fácil. Como los que dicen "por algo debe ser" o "algo habrán hecho".
Mucha suerte, porque la vamos a necesitar todos los que no somos parte de tu "idea metafísica".
Ah: y los medios cuando no tienen razón, la producen.
No firmé porque la ultima vez que lo hice nunca me contestaste. No se porque. El termino "metafisica", desde Aristoteles en adelante, se emplea para referirse a algo mas allá de lo fisico. Igualmente poca importancia tiene el uso gramatical del termino, particularmente cuando estaba siendo marcadamente ironico, aludiendo a la construccion que hacen los sectores afines al oficialismo sobre todo aquello que es distinto a ustedes. El ejemplo mas cabal es que ya me endilgaste el pertenecer a "la derecha".
Sin embargo, no considerandome de "derecha", pero si republicano y liberal en un sentido morenista (como el heroe patrio, no como el secretario de comercio) del termino, me asusta la posibilidad de que entiendas como peligrosa a una expresion politica. Los fascistas pensaban así. Una idea se puede compartir o no. Pero siempre hay que tolerarla, y aceptarla. Lo mismo con los espacios politicos y el pensamiento politico, mas alla de que no se comparta.
Tu comentario sobre "el mediopelo" tiene una logica similar a los que piensan en el "voto cautivo", o esclavo. Es menospreciar a todo un conjunto de ciudadanos por haber elegido otro camino. Esas generalizaciones son bastante simplistas e idiotas a mi entender, creo que Borges decia algo parecido. Y el termino "algo habran hecho", no significa nada mas que lo que significan las palabras. El oficialismo perdio adeptos. Por alguna razon debe ser, o ¿vos crees que pasó y no hay ninguna razon para que eso pasara? ¿O directamente no crees que hayan perdido votos?
Y que los medios construyen opinion, no te lo voy a discutir. Todos los medios lo hacen, el canal publico incluido ¿o no? Es una lastima que se hayan acordado tan tarde, sino podrian no haberle renovado el imperio monopolico a clarin.
Mi nombre es Santiago Caputo, tengo 23 años, soy estudiante de la UBA, y siempre encuentro gratificante la discusion con aquellos que piensan distinto de mi.
Santiago: es tarde y fue un día arduo. Me comprometo a responderte mañana, como corresponde, atendiendo a cada punto de tu comentario que encuentre relevante.
Lo único que no puedo dejar pasar: te hago notar que Mariano Moreno es también autor del Plan de Operaciones que haría poner de punta los pelos de lectores de La Nación, republicanos y liberales como también son.
Nos vemos mañana.
Ah: y tengo que hacerte notar que el término "metafísica" (de "μετά τα φυσικά") jamás fue articulado por Aristóteles que hablaba simplemente de "ciencia". En todo caso, desde Andrónico de Rodas, unos cuatrocientos años más tarde que el celador de Alejandro.
Estoy enojado.
Liberales bienpensantes civilizados sonrientes republicanos de 23 años...brrrr, que horror!
Con gusto mañana seguimos charlando, pero de vuelta, no puedo dejar de hacerte notar que la relacion que haces con respecto al Plan de Operaciones es, tambien, bastante simple. Ese plan fue ideado hace 200 años, con todo lo que eso implica,y en un contexto revolucionario.
Con respecto al termino, me exprese mal, no quise decir que lo utilizara Aristoteles.
Yo no se si los lectores de La Nacion son republicanos y liberales, se que el diario tiene una tendencia mas conservadora, que poco tiene que ver con lo que yo quiero decir con liberal y republicano.
Saludos
PD: Sr. Mosquito, no entiendo su calificacion. Los cuatro adjetivos que utiliza son positivos para un ciudadano de una republica federal representativa. Si me pudiera explicar cual es el horror, se lo agradeceria.
Saludos
Santiago Caputo
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<< volvé a ficcionalista!